Seguramente hayas oído hablar del término “automedicación” alguna vez y, también, habrás oído hablar bien y mal sobre dicho término.
Lo primero que hay que saber es que existe un tipo de automedicación llamada automedicación responsable que incluso la OMS puede recomendar. Hoy en este artículo hablaremos de cada una de ellas y profundizaremos en el tema.
¿Qué es la automedicación y cuáles son sus consecuencias?
La automedicación es el uso de medicinas para enfrentar una enfermedad o dolencia, o aliviar un síntoma sin el asesoramiento previo de un médico especializado. Siendo esta administrada por decisión propia, sin prescripción médica o por consejo de alguien no cualificado.
La automedicación tiene unos riesgos, ya que su utilización por cuenta propia puede ocasionar daños en la salud del paciente. Si este no está informado adecuadamente sobre estos medicamentos, pueden ocurrir algunos efectos de forma frecuente, como alergia, intoxicación, infecciones e incluso, en el peor de los casos, la muerte.
En niños, embarazadas y adultos, por su situación especial, suelen darse problemas más graves, por eso es totalmente desaconsejable la automedicación en estas etapas de la vida.
¿Qué es la automedicación responsable según la OMS?
Ya sabemos que es la automedicación convencional, pero ¿Qué dice la OMS de la automedicación? Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la automedicación se define como la selección y uso de medicamentos por los individuos para tratar enfermedades o síntomas auto-reconocidos.
La OMS recomienda una medicación responsable y establece unas recomendaciones para el uso de medicamentos de venta libre:
Las opciones de tratamiento deben ser efectivas para aliviar los síntomas que justifican su uso. Estos síntomas generalmente deben ser de naturaleza autolimitada, lo que significa que no empeoran con el tiempo. Además, es crucial que los tratamientos sean confiables, brindando una respuesta constante y rápida para que las personas que los tomen puedan experimentar sus beneficios de manera notable.
Por supuesto, la seguridad es fundamental, ya que estos tratamientos se utilizan en situaciones con un buen pronóstico y no requieren conocimientos especializados para su identificación. Dado que estas enfermedades son comunes y tienen características distintivas, su diagnóstico debe ser fácil de realizar.
Por último, es importante que el uso de estos tratamientos sea sencillo y conveniente, evitando la necesidad de precauciones complicadas o poco comunes por parte de los usuarios.
En resumen, se trata de automedicarse solo aquellas veces que la patología sea leve, corta y la conozcamos previamente. Es decir, aquellas ocasiones en las que ya hemos acudido a un especialista por la misma causa y el tratamiento ha sido siempre el mismo. Por lo que nosotros ya conocemos el tratamiento completo para esta dolencia menor.
Una regla clara para saber si se está haciendo una automedicación responsable es percatarse de si el medicamento que quieres comprar o tomar necesita receta médica. Si es así, es mejor que acudas a consulta antes de empezar con el tratamiento
¿Cuáles son los tipos de automedicación?
Es importante conocer los diferentes tipos de automedicación para poder evaluar adecuadamente los riesgos asociados. Los siguientes son algunos ejemplos de automedicación más comunes:
- Automedicarse con medicamentos que no están autorizados sin fórmula médica (es decir, que no son de venta libre).
- Automedicarse con medicamentos prescritos por el médico para el tratamiento de una enfermedad pasada.
- Automedicarse con medicamentos prescritos a otra persona para una afección “similar”.
Estos son algunos de los medicamentos que suelen usar la mayoría de los pacientes que han practicado la automedicación:
- Antisépticos tópicos.
- Suplementos vitamínicos y minerales.
- Antigripales y antitusígenos.
- Digestivos, laxantes, antiácidos y antiflatulentos.
- Analgésicos
- Antibióticos
Los analgésicos y los antibióticos son de los más usados en automedicación y también los más peligrosos, ambos pueden suponer riesgos tanto individuales como colectivos, debido a la posible generalización de resistencias a bacterias.
¿Cómo realizar automedicación responsable?
Para realizar una automedicación responsable hay que informarse bien sobre qué tipo de medicamentos se pueden tomar sin acudir a un médico. Generalmente es una práctica indicada para los productos naturales y en las recomendaciones dadas por los profesionales no se indican casi en ningún caso los antibióticos.
Ventajas y desventajas de la automedicación responsable:
Ventajas de la automedicación responsable:
- Alternativa para el cuidado de la salud cuando se trata de afecciones leves y conocidas.
- Satisface necesidades físicas y psíquicas, brindando un alivio inmediato de los síntomas.
- Puede contribuir al bienestar público al permitir una atención más rápida y accesible.
- Promueve la corresponsabilidad del individuo en el cuidado de su salud.
- Relativamente económica en comparación con las consultas médicas.
Desventajas de la automedicación responsable:
- Riesgo de reacciones adversas, desde leves hasta severas, y alteraciones fisiológicas y metabólicas potencialmente peligrosas.
- Posibilidad de enmascarar síntomas de enfermedades graves y retrasar un tratamiento adecuado.
- Interferencia con los mecanismos naturales de defensa del cuerpo.
- Potenciales interacciones con otros medicamentos, alcohol o alimentos, que pueden ser peligrosas.
- Desarrollo de cepas resistentes a los antibióticos y posibles efectos sobre el feto en mujeres embarazadas.
- Riesgo de dependencia física y psíquica en algunos medicamentos.
- Posibilidad de reacciones inmunológicas y agravamiento de condiciones patológicas.
¿Cuál es el riesgo de automedicarse?
La automedicación puede tener una serie de riesgos, entre ellos se encuentran los siguientes:
- Agravamiento de la enfermedad. Al automedicarse sin un diagnóstico médico preciso, es posible que los medicamentos seleccionados no sean los más adecuados para tratar la condición específica y existe el riesgo de que los síntomas empeoren o que la enfermedad no se trate adecuadamente.
- Efectos adversos o indeseados. Los medicamentos no son inocuos y pueden tener efectos secundarios o indeseados. Cada persona es única y puede reaccionar de manera diferente a los medicamentos. Sin la supervisión de un profesional de la salud, existe un mayor riesgo de experimentar estos efectos, como reacciones alérgicas, interacciones entre medicamentos o complicaciones imprevistas.
- Intoxicación. La automedicación irresponsable puede llevar a una sobredosis accidental o a un uso incorrecto de los medicamentos. Esto puede resultar en una intoxicación, especialmente si se toman dosis incorrectas o se combinan diferentes medicamentos sin la debida precaución. Algunos medicamentos, como los analgésicos opioides, los tranquilizantes o los medicamentos para el corazón, pueden tener un potencial de abuso y adicción si se utilizan incorrectamente
- Ocultamiento de otro problema de salud más grave. La automedicación puede enmascarar los síntomas de una enfermedad subyacente más grave. Al tratar los síntomas superficialmente sin abordar la causa subyacente, se corre el riesgo de retrasar el diagnóstico y el tratamiento adecuado de condiciones médicas más serias. Esto puede llevar a complicaciones innecesarias y un deterioro de la salud a largo plazo.
- Desarrollo de resistencia a un antibiótico. El uso inapropiado o excesivo de antibióticos puede contribuir al desarrollo de resistencia bacteriana. La automedicación con antibióticos sin la supervisión de un médico puede llevar a una utilización incorrecta de estos fármacos, lo que favorece la aparición de bacterias resistentes. Esto limita la eficacia de los antibióticos cuando son realmente necesarios, poniendo en riesgo el tratamiento de infecciones graves.
¿Por qué es importante evitar la automedicación?
Evitar la automedicación garantiza la seguridad y eficacia del tratamiento, permite obtener un diagnóstico adecuado, previene interacciones medicamentosas negativas y ayuda a combatir la resistencia antimicrobiana. Siempre es recomendable buscar la orientación de un profesional de la salud antes de tomar cualquier medicamento.
¿Qué factores influyen en la automedicación?
Si te estás preguntando ¿por qué la población se automedica? Te diremos que los principales factores son la falta de tiempo para acudir a la consulta médica, las largas colas de espera en la Sanidad o carencias en la atención médica. Además de tener conocimientos sobre medicamentos o por el consejo y recomendación de personal de boticas o farmacias.
Otro de los motivos más frecuentes también, es el haber padecido con anterioridad la misma enfermedad o tener síntomas similares. En este caso es probable que la persona reanude el consumo del mismo medicamento que tomó en el pasado.
¿Qué órgano se daña por tomar pastillas?
El hígado es un órgano vital que ayuda a descomponer ciertos medicamentos en el cuerpo. Esto incluye tanto medicamentos de venta libre como aquellos recetados por un médico. Sin embargo, en algunas personas, este proceso es más lento, lo que aumenta el riesgo de daño hepático.
Existen medicamentos que pueden causar hepatitis incluso en dosis pequeñas, incluso si el hígado funciona correctamente. Por otro lado, tomar grandes cantidades de medicamentos puede dañar un hígado sano.
Hay varios medicamentos que pueden afectar el hígado. Un ejemplo común es el uso excesivo de analgésicos y medicamentos para reducir la fiebre que contienen paracetamol (acetaminofeno), especialmente cuando se toman en dosis mucho mayores a las recomendadas. Las personas que abusan del alcohol también tienen mayor riesgo de sufrir problemas hepáticos relacionados con estos medicamentos.
Los antiinflamatorios no esteroides (AINE), como el ibuprofeno, el diclofenaco y el naproxeno, también pueden causar hepatitis inducida por medicamentos.
¿Cómo prevenir el mal uso de los medicamentos?
La automedicación constituye un hecho cotidiano y habitual en la mayoría de los hogares españoles, aunque cada vez se va creando más conciencia y se está viendo reducido poco a poco el número de personas que sufren algún perjuicio por automedicación. Aunque debemos seguir revirtiendo este hecho y enseñar a los pacientes a utilizar correctamente los medicamentos.
Los médicos y centros de salud deberán estar actualizados y desarrollar constantemente medidas informativas y educativas, tanto en el día a día de su centro de trabajo como cada vez que prescriban un fármaco a un paciente en concreto.
- Referencias bibliográficas:
Actualización en Medicina de Familia. Automedicación | Medicina de Familia. SEMERGEN (elsevier.es)
Automedicación responsable: ¿es posible? | En Genérico (engenerico.com)
Tipos de automedicación – Consecuencias de una mala comunicación con el paciente (1library.co)
OMS automedicación convencional tipos de automedicación – Búsqueda (bing.com)
Automedicación: qué es y consecuencias (tuasaude.com)
Los peligros de la automedicación | Picasso Centro Médico (picassocentromedico.com)
Automedicación: ¿cuáles son los riesgos? – Muy Salud
Los efectos negativos de la automedicación (psicologiaymente.com)